No les voy a decir mentiras, yo estaba dispuesta a esperar el tiempo que fuera para volver a hacer los talleres de escritura creativa presenciales. Para mí, la magia estaba en ver sus caras mientras escribían, tomar café juntos, oír las risas o el llanto en el mismo lugar. Me daba miedo que la pantalla nos arrebatara todo eso.
Pero esperé y esperé, hasta que cuatro meses después entendí esta pandemia iba para largo… y que era hora de probar algo nuevo.
Ayer, en el primer taller online de Escritura Creativa, desde que la primera escritora se paró a leer, me di cuenta de lo MUCHO que había extrañado escuchar sus historias. Entendí que no importa si estamos al lado o a miles de kilómetros, lo que hace la magia es sentarnos a crear al mismo tiempo.
Este grupo no solo tenía alumnas de todos lados (Medellín, Barranquilla, Bogotá, Palmira y hasta de Estados Unidos), sino que venían cargadas de historias. Escribimos sobre la llegada al mundo, los vínculos que se rompen, las amigas que cambian, los desconocidos que guardan secretos, sobre tantas cosas…
Vivian, Andrelly, Karen, Clara, Meliza, Lina, Manu, Eli, Sofi y Luisa, ¡gracias por sentarse a escribir conmigo, por compartir al mundo sus historias!
Ahora… ¡nos veremos en el #Reto2121!